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Psicologia
Consejos laborales previos a las vacaciones

 

Comienza a acercarse el periodo de vacaciones, con el consiguiente estrés por finiquitar los asuntos pendientes previos a dejar nuestro puesto de trabajo. Y si encima alguna de las personas de su entorno laboral ha marchado ya, las cosas pueden tornarse insostenibles.

Gran parte de los empleados afirman que los días más agobiantes en la práctica laboral son los días anteriores a marcharse de vacaciones. Otro factor es que al reducirse la plantilla porque alguno de los compañeros ya ha marchado, el volumen de trabajo aumenta considerablemente. Para evitar todo esto, es fundamental que el trabajador cree un plan de acción para evitar que se produzca un cúmulo excesivo de trabajo a última hora y asegure un tranquilo regreso al puesto de trabajo tras las vacaciones. Algunas de las recomendaciones a seguir para evitar dicha ansiedad son:

- Hacer un planning. Realizar una simple tarea como podría ser un esquema o lista de tareas con todos los objetivos y las fechas de entrega, conseguiría una mejora en la estructura del trabajo y lograr alcanzar lo encargado antes de marchar.

- Administrar los recursos. El trabajador conoce cuales de las tareas son difíciles de realizar antes del tiempo previsto, y que pueden surgir problemas que no se pueden prever. Por lo tanto, es clave desligar de forma prudente las actividades que quedarán sin resolver hasta la vuelta y planificar aquellas que pueden aparecer justo antes de salir de vacaciones.

- Traspaso de tareas. Poder delegar cierta parte del trabajo a un compañero para lograr una meta común es una costumbre que todos los empleados deben probar. De este modo, cuando las vacaciones se acerquen, el traspaso de algunas tareas ayudará a una mejor administración del tiempo.

- Organizar reuniones importantes.  La llegada de las vacaciones puede cortar el comienzo de un proyecto clave o una actividad de suma importancia. Si esto ocurre, lo más lógico es aplazar las vacaciones para con ello, conseguir alcanzar las metas de mayor importancia y completarlas para evitar que se queden inacabadas.

- Dar prioridades. Para organizar todas las tareas y encuentros de trabajo que exigen cierto tipo de proyectos, es necesario que el empleado dé prioridad y tome decisiones sobre cuáles de sus actividades han de ser las primeras en terminarse y cuáles pueden posponerse a la vuelta de las vacaciones.

- Avisar de la marcha. Un mensaje de texto al móvil, un whatsapp o el envío de un correo electrónico para informar sobre la marcha y los días que se va a estar fuera, puede prevenir de problemas o posibles conflictos en el puesto de trabajo. También sería conveniente comentarlo a los compañeros más cercanos y clientes de más confianza.

- Reunión de equipo. Los días previos a la salida por las vacaciones es aconsejable una reunión con el resto de empleados y puestos superiores con el fin de clarificar el estado del trabajo y quién será el encargado de cada tarea.

- Recoger el lugar de trabajo. Como está ordenada la mesa de trabajo, refleja el orden en nuestra cabeza. Tener todo organizado ayudará al empleado a visualizar sus citas pendientes y programar su trabajo de forma eficiente.

- Organizar la vuelta. El periodo vacacional sólo servirá como descanso, si el empleado no se encuentra agobiado por los posibles trabajos pendientes que queden en la oficina.

- Cumplir con lo planificado. El objetivo de una buena estructuración es conseguir lograr las metas propuestas. Sin embargo, por ello hay que ser realistas en cuanto a los plazos marcados para cada tarea.


Álvaro Rojo