Como hemos dicho en el artículo anterior sobre fotoprotección ocular, existen diferentes tipos de gafas solares. La indicación de CE nos indica que cumple la normativa, pero no nos da información sobre el tipo de filtro que requerimos para diferentes situaciones.

Hay que tener en cuenta que unas gafas de sol más oscuras no significan mayor protección, sino que debemos buscar el filtro adecuado.

• • Categoría 0: lentes claras o ligeramente coloreadas.

Se deben utilizar para interiores o cielo cubierto. No tienen restricciones a la conducción.

• • Categoría 1: lentes ligeramente coloreadas.

Están diseñadas para luminosidad solar ligera, y no deben utilizarse para conducción nocturna.

• • Categoría 2: lentes medianamente coloreadas.

Indicadas para luminosidad solar media, y por supuesto no aptas para conducción nocturna.

• • Categoría 3: lentes fuertemente coloreadas.

Indicadas para luminosidad solar fuerte y no aptas para conducción nocturna.

• • Categoría 4: lentes muy oscuras.

Para luminosidad solar extrema y no aptas para conducción, ni diurna ni nocturna.

Las gafas de sol que debemos utilizar en nuestra vida diaria deberían encontrarse entre la categoría 2 y 3.

Existen diferentes colores de lente para las distintas situaciones:

• • Lentes color amarillo. Reducen la bruma y mejoran el contraste. Son útiles para deportes como el esquí, el tiro y la caza.
• • Lentes color verde. Son adecuadas para cualquier actividad, ya que alteran en poca medida los colores.
• • Lentes color marrón. Alteran más los colores que la anterior, pero mejoran los contrastes, son de alta protección y se aconsejan en deportes de montaña.
• • Lentes color gris. Es el color más cómodo por su baja distorsión. Son aconsejables para la conducción y exposiciones prolongadas al sol, siempre y cuando no sea en condiciones extremas.
• • Lentes color degradado. Muy común desde el punto de vista estético, pero hay que tener la precaución de que la luz reflejada desde abajo es más intensa.
• • Lentes color fotocromático. Son gafas que se aclaran u oscurecen en función de la luz. Normalmente no deben utilizarse para conducir porque el parabrisas no deja pasar la luz ultravioleta, y no se oscurecen adecuadamente. Son útiles en personas que necesitan constantemente gafas y así evitar la molestia de estar cambiando de gafas continuamente.

Como hemos comentado en el artículo anterior, los niños no tienen totalmente desarrolladas sus protecciones naturales a las radiaciones solares, por lo que deben ir siempre protegidos con gafas de sol adecuadas que absorban el 100% de los rayos ultravioleta.