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VidaSana
Cinco grandes mitos de la nutrición y el deporte

La alimentación en el deporte es un área especialmente conflictiva.

Lo es debido a la cantidad de gente que practica deporte y el perfil especial que tienen. Es decir, son personas muy motivadas y que por lo general invierte dinero en su salud. Por tanto, constituye un nicho de mercado, sobre el cual muchas empresas o particulares quieren hacer negocio.

Por si fuera poco este motivo, además es por sí misma área muy complicada. Pensad lo difícil que es ya de por sí la relación nutrición-salud. Pues más complejo aún será el cuerpo de un deportista, que tiene requerimientos superiores.

Este contexto, hace que surjan mitos y creencias populares como las siguientes:

“Hay que hincharse a proteínas para ganar músculo”

Falso. El cuerpo llega un momento, que por más proteína que le des, no vas a ganar más musculo. No hay beneficios extra en dietas muy altas en proteína (más allá de 2g/kg peso corporal). El factor clave es el entrenamiento. Ganamos músculo con un esfuerzo físico de intensidad, que rompa fibras, nos provoque una inflamación, y nuestro cuerpo entonces hace una compensación para el día de mañana y así poder hacer ese ejercicio.

Lo que tenemos que garantizar es que nuestra dieta nos aporte una cantidad suficiente de proteínas.

“Tomar claras de huevos crudos es una buena fuente de proteínas”

Falso. La proteína cruda se digiere peor. Pasa con la carne, el pescado, el huevo. Cuando la coagulamos (cociéndola por ejemplo) podemos aprovecharla mucho mejor ya que la digerimos en mayor medida.

Y no termina ahí la cosa. El huevo tiene antinutrientes, está preparado para sobrevivir y resistir el ataque de microorganismos. Para proteger al futuro embrión. Tiene sustancias como la Conalbúmina el Ovoinhibidor o la Avidina que impiden que se utilice el hierro o algunas proteínas. Por eso, si lo tomamos crudo no podemos absorber esos nutrientes, aunque está orientado a no dejar crecer a las bacterias.

Además, con la moda de evitar la grasa de los 90, mucha gente dejó de consumir la yema. Lo que es una lástima, porque del huevo es lo que tiene más interés nutritivo a nivel de micronutrientes, y tampoco va mal de proteína, tiene cerca del 40% de la proteína del huevo. Inexplicable.

“Hay que comer nada más terminar la actividad física”

Depende del caso. Podríamos decir que el error aquí que cometen muchos deportistas, es creer que nada más terminar la sesión de entrenamiento hay que tomar la proteína corriendo, porque piensan que si no lo hacen durante este tiempo no generarán tanto músculo.

Es cierto que nada más terminar, hay un periodo de tiempo, que se conoce como “ventana metabólica” en el cuál es más fácil reponer los nutrientes. Pero esto solo es así con los hidratos de carbono que guardamos en el músculo: el glucógeno, pero no con la proteína.

“Solo se empieza a quemar grasa tras media hora de ejercicio”

No es cierto. El combustible que nuestro cuerpo usa depende del esfuerzo que nos requiere, del volumen de oxígeno que usamos en esa actividad.

Hay que intentar encontrar un volumen de esfuerzo que nos permita un gasto alto, pero sin que recurra totalmente al azúcar. Se habla que esa intensidad es aquella en la que podemos hacer la actividad de manera agradable, pero si empezamos a hablar nos falta el aliento. ¿Puedes probar a encontrarla?

“Para perder peso es mejor correr en ayunas”

Depende. Puede ser una estrategia útil para profesionales, sobre todo si buscan mejorar su tolerancia al ejercicio con pocas reservas, pero que para personas que se quieran iniciar no es la mejor opción.


Aitor Sánchez