Cuando hablamos de estevia o stevia podemos hacerlo refiriéndonos a dos cosas:
Por un lado, a una planta que se ha cultivado tradicionalmente en Centroamérica y en Sudamérica. Y por otro al edulcorante que se extrae de esta planta y que está tan de moda. También conocido como “glucósidos de esteviol”
La comercialización de la planta como tal no está autorizada para consumo humano, algo que es en realidad un vacío legal, ya que la podemos obtener fácilmente, pero no “supuestamente” para un fin alimentario. Por lo tanto si nos dirigimos a un establecimiento para obtener estevia con este fin, esperaremos obtener el edulcorante que se obtiene a partir de la planta, a pesar de que mucha gente a título individual puede tener por supuesto en casa hojas de estevia.
La stevia y otros edulcorantes frente al azúcar ¿qué es mejor?
La estevia y cualquier edulcorante autorizado, que hay muchos. Tienen la ventaja de que permite sustituir el sabor dulce del azúcar, y por tanto no ingerimos tantas calorías.
Esto es realmente interesante, ya cuando consumimos azúcar no estamos aportando nada más que energía al cuerpo, ningún otro nutriente de interés. Esto es lo que se conoce como “calorías vacías”, ya que es una manera en la que ingerimos calorías y nada más, no hay nutrientes que la acompañen.
Consumir azúcar dista mucho de cuando nos tomamos una fruta, que además de tener su azúcar, también nos aporta vitaminas, minerales y fibra.
Además, el consumo de azúcar está relacionado con el sobrepeso, la obesidad, además predispone a dislipemias como son el aumento de colesterol y triglicéridos, además de producir caries, hígado graso y facilitar la aparición de Diabetes Mellitus.
De ahí que se diga que es preferible sustituir los productos azucarados por edulcorados.
¿Todos son beneficiosos por parte de los edulcorantes?
Todos los edulcorantes a día de hoy, tienen autorizadas las mismas declaraciones nutricionales y de salud. Se ha visto que son interesantes para reducir el aporte calórico y para conservar la salud dental, siempre y cuando se usen para sustituir los productos azucarados.
Es decir, introducir a tu dieta productos con edulcorantes NO adelgaza, ni mejora la densidad de tus dientes. Pero sí que es interesante en el caso de que consumieses por ejemplo yogures azucarados, y ahora edulcorados. O si por ejemplo los refrescos ahora los tomases sin azúcar. Aunque por supuesto, la opción más saludable en ambos casos sería agua un yogur natural sin azucarar.
A pesar de estos beneficios que encontramos al sustituir azúcar por edulcorantes, no todo son buenas noticias. Por un lado los edulcorantes pueden acostumbrarnos a un umbral del sabor dulce alto, y hacer por tanto que “necesitemos” más cantidad de azúcar para encontrar apetecibles los alimentos. También debemos señalar que algunas personas empiezan a descuidar sus hábitos cuando creen que tienen una solución parcial a sus problemas, es decir, algunas personas pueden despreocuparse de su dieta alegando que toman edulcorantes.
Por último, los edulcorantes nos modifican la flora intestinal, cambiando la proporción propia de bacterias en nuestro aparato digestivo. Esta alteración conocida como disbiosis, puede conllevar otros problemas para la salud que están siendo actualmente investigados.
¿Puede curar la estevia la diabetes?
En líneas generales, atribuir a un alimento capacidades “medicinales” o “curativas” es irresponsable. Y probablemente tenga un fin comercial detrás de ello. Nuestra salud depende de un compendio muy global, y la dieta la forman muchos alimentos. No se pueden decir sentencias y mentiras como:
-La estevia cura la diabetes.
-La estevia adelgaza.
Hay algunos indicios que podrían indicar que es hipoglucemiante, o que baja la tensión. Pero a día de hoy no hay una evidencia sólida.
Por tanto, ni podemos alarmar diciendo que su consumo es peligroso, pero tampoco podemos vender humo diciendo que tiene propiedades curativas.
¿Es natural y por tanto mejor que otros edulcorantes?
Las hojas de la planta tienen los glucósidos de esteviol. Que son los que dan sabor dulce. Y alrededor de esta tradición cultural de muchas poblaciones americanas, se ha creado esta imagen de “naturalidad”
Esto es importante matizarlo.
El término natural, ya de por sí es difícil identificarlo en nutrición. ¿Cultivar es natural? ¿Incubar bacterias para hacer yogur es natural? ¿E inocular levadura para la cerveza o el pan?
La Estevia se ha identificado con la naturalidad, no se dice en su envasado que es el E-960, porque perdería esa imagen que se ha creado. Al igual que no se nombra su procesado, que requiere una extracción de los glucósidos a 60º, con una posterior nanofiltración, y luego se cristaliza con evaporadores de vacío. Porque eso no suena natural y se les desmonta la emotividad que tiene el producto.
Por último, recomendamos estar atentos al etiquetado, algunos sobres de estevia solo tienen el 1% en peso de estevia, el resto son otros edulcorantes como el eritritol que se adicionan para compensar.
Las cosas por ser naturales, no son mejores ni peores. Nuestro cuerpo no actúa diferente al origen de las sustancias, sino a cómo nos tomamos los alimentos.
La estevia es un edulcorante que se puede usar como cualquier otro, pero no es mejor por el hecho de ser “natural”.